Longevidad del casco
Es fundamental comprar un casco nuevo si presenta grietas o abolladuras, asegurándose de que la hebilla, las correas y el posible sistema de tallaje ajustable sigan siendo sólidos.
Los cascos, ya sean de ciclismo o de patinaje, no están diseñados para durar indefinidamente. Es esencial vigilar el desgaste y los daños, ya que estos factores disminuyen la capacidad Protectiva del casco.
¿Cuándo hay que cambiar el casco?
Tras un impacto importante, todos los cascos de ciclista o patinador deben sustituirse, incluso si no presentan daños visibles. Internamente, el casco puede estar dañado, lo que es invisible a simple vista. El sudor puede degradar la espuma, fundamental para la absorción de impactos. Cualquier desgaste o grieta en esta espuma significa que ha llegado el momento de comprar un casco nuevo.
Con un uso regular, se recomienda sustituir el casco cada cinco años.
Además, a medida que los niños van creciendo, es fundamental asegurarse de que el casco se ajusta correctamente y ofrece la protección adecuada.
¿Cómo puedo revisar mi casco?
Si responde afirmativamente a alguna de estas preguntas, indica que su casco de ciclismo o patinaje está en mal estado y necesita ser sustituido.
- ¿Hay grietas, rasguños o abolladuras en la calota exterior? Examina la calota exterior. Si presenta decoloración, puede significar que la radiación UV y la exposición al viento han debilitado el plástico, por lo que es necesario sustituirlo.
- ¿Muestra la calota interior signos de agrietamiento o envejecimiento? Da la vuelta al casco, retira el acolchado e inspecciona la calota interior.
- ¿Funcionan mal las hebillas y las correas? Compruebe que las hebillas encajan correctamente y que las correas permanecen intactas.
- ¿Es difícil ajustar el sistema ajustable de la talla? Algunos cascos incluyen una hebilla trasera giratoria para personalizar el tallaje. Si no funciona correctamente, debe cambiar el casco.